Un último deseo

Josh Morten era un quinceañero norteamericano al que le detectaron una leucemia terminal. Cuando sus padres le preguntaron cuál sería su último deseo, el muchacho fue sincero y contestó lo que a más de uno se le pasaría por la cabeza: "Quiero que me la coma Cameron Diaz".

Sus padres lo intentaron de todas las maneras posibles, pero pasados unos años sin haberlo conseguido, decidieron darle luz a este asunto y mostrar su enfado hacia la guapa actriz: “Josh nunca pidió tanto. Él jamás se quejó sobre su enfermedad, o pidió cosas imposibles. Por eso, cuando quiso una felación por parte de la estrella de “Los Ángeles de Charlie” y “Algo pasa con Mary” pensamos que eso era lo mínimo que podíamos hacer por él”, confiesa el padre de Josh.

Todos los esfuerzos por parte de la familia fracasaron: “Escribimos, llamamos, envíamos faxes, pero todo fue en vano. Lo sentimos, pero la señora Díaz no puede satisfacer sus demandas. Esa es la respuesta que constantemente nos daban, y, quiero decir, ¡qué poco condescendiente con nuestra situación!”, relata el padre.
“¡Quién se han creído que son esas mujeres! Ganan millones de dólares y van de fiesta en fiesta, pero cuando reciben una simple petición para hacer sonreir a un pequeño mucho más desgraciado que ellas, nos dan la espalda. ¡En qué mundo vivimos si a un adolescente que está a punto de morir no le satisface al menos su último deseo!”.

Desde aquí, nos solidarizamos con el pequeño Josh y tomamos nota: hay que empezar a pensar en cuál sería nuestro último deseo.